Por Juan Pablo Ojeda
Robbie Williams encendió las alarmas entre sus seguidores al revelar que su visión se ha deteriorado desde que comenzó a utilizar medicamentos para bajar de peso. El cantante, conocido por su franqueza al hablar de su salud física y emocional, explicó que su vista se ha vuelto cada vez más borrosa y que sospecha que el problema podría estar relacionado con las inyecciones que recibe como parte de su tratamiento.
“Llevo un tiempo viendo borroso, y cada vez va a peor… no creo que sea por la edad; creo que son las inyecciones”, dijo el artista, generando preocupación sobre los posibles efectos secundarios de estos fármacos, populares entre celebridades y el público en general.
Si bien Williams ha reconocido que el tratamiento le ha ayudado a controlar su peso y a mantener estabilidad emocional, ahora enfrenta un efecto secundario que lo tiene inquieto. Algunos estudios han sugerido una posible relación entre los medicamentos GLP-1 y un raro problema ocular que afecta el nervio óptico, lo que ha incrementado las dudas del intérprete ante la posibilidad de perder visión en un ojo.
El músico aprovechó la ocasión para lanzar una advertencia: quiere que quienes usan o evalúan usar este tipo de fármacos estén bien informados y consulten a especialistas antes de tomar cualquier decisión. Su llamado coincide con la postura de la farmacéutica Eli Lilly —creadora de Mounjaro—, que informó que sigue revisando los casos reportados y recomendó acudir al médico ante cualquier síntoma anormal.
Por ahora, Robbie Williams continuará bajo supervisión médica, evaluando si es necesario ajustar o suspender el tratamiento. Mientras tanto, su testimonio vuelve a poner bajo la lupa el uso de medicamentos para adelgazar en la industria del espectáculo, donde la presión por mantener cierta imagen suele empujar a las estrellas a tratamientos que requieren vigilancia estricta.
