Tamaulipas a 8 de agosto, 2025.- En una tarde que paralizó Reynosa, el delegado de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tamaulipas, Ernesto Cuitláhuac Vázquez Reyna, fue asesinado el pasado 4 de agosto en un violento atentado que incluyó una granada y disparos en plena avenida Miguel Hidalgo. El vehículo Cadillac Escalade en el que viajaba fue incinerado, y aunque sobrevivió inicialmente a la explosión, fue rematado por individuos armados.
Las autoridades federales y estatales coordinaron un operativo inmediato; tras bloqueo y balaceras en varias zonas, se logró la detención de Jaret Roberto “H”, presunto miembro de la facción “Los Metros” del Cártel del Golfo. Estaba escondido en un centro de rehabilitación en Reynosa y fue capturado con armas largas, cargadores y droga.
La FGR sugiere que el crimen podría estar vinculado a operativos recientes contra el huachicol, entre ellos uno en la colonia La Escondida I donde se aseguraron más de 1.8 millones de litros de hidrocarburo.
Este ataque sacudió a la región: hubo persecuciones, bloqueos y balaceras en vialidades clave como Jarachina Norte, Mil Cumbres y Viaducto Reynosa.
Mientras tanto, se supo que Vázquez Reyna investigaba desde mayo a Tania Gisela Contreras López, presidenta electa del Poder Judicial de Tamaulipas, por asociación delictuosa y tráfico de influencias. La denuncia fue presentada por el PAN ante la FGR, aunque el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) desestimó la impugnación al considerar que el partido no tenía “interés jurídico” para impugnar.
Contreras ha denunciado una campaña de desprestigio y promovido acciones legales por “violencia política de género” contra periodistas —incluyendo solicitudes para eliminar publicaciones que la mencionan— sin que esos recursos hayan prosperado.
