Gómez Palacio estrenó Grito con drones ante miles de asistentes en la explanada central.
La presidenta municipal Betzabé Martínez Arango encabezó su primer acto cívico con saldo positivo: orden en accesos, ambiente familiar y participación masiva. El protocolo combinó arenga tradicional y una verbena con mariachis, bailes y antojitos que mantuvo la plaza activa sin incidentes relevantes.
El clímax llegó con el show de drones: figuras de la gesta independentista y la silueta de la presidenta Claudia Sheinbaum iluminaron el cielo. La apuesta tecnológica —más limpia y silenciosa que la pirotecnia— mostró que innovación y tradición pueden convivir sin perder el pulso popular.
En lo simbólico, el acto dialogó con la escena nacional al subrayar la presencia de mujeres en la vida pública. En lo práctico, Protección Civil y policía municipal priorizaron accesibilidad y flujo peatonal, pieza clave para que la fiesta fuera de todos y no solo de balcón.
Más que lucecitas en el cielo, el mensaje fue claro: cuando el gobierno baja a la explanada, el civismo se vuelve costumbre. Buen punto de partida para el calendario cívico de la administración.
