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El Mundial de Futbol 2026, que por primera vez será organizado de manera conjunta por Canadá, Estados Unidos y México, ya empezó a jugarse fuera de la cancha. En apenas 24 horas, la FIFA recibió al menos cinco millones de solicitudes de entradas durante el más reciente sorteo de boletos, una cifra que refleja la enorme expectativa global por el torneo que se disputará en América del Norte.
Cruz Azul y Flamengo se cruzan este miércoles 10 de diciembre en Qatar para escribir un nuevo capítulo del llamado Derbi de las Américas de la FIFA, un duelo que mezcla historia, orgullo continental y dos presentes completamente distintos. De un lado llega La Máquina, reciente campeona de Concacaf pero golpeada física y anímicamente tras caer en la semifinal del Apertura 2025 ante Tigres. Del otro, un Flamengo encendido, que presume Libertadores y Brasileirao como si fuera rutina y que aterriza en Medio Oriente con la mesa puesta para un cierre de año espectacular.
En la mañanera de este lunes, Claudia Sheinbaum dejó claro que, aunque fue invitada a la inauguración del Mundial 2026, no piensa tomar ese lugar privilegiado. Cuando un reportero le preguntó si reconsideraría su presencia tras lo ocurrido en el sorteo en Washington, la presidenta respondió sin rodeos: “Voy a ver la inauguración aquí con la gente en el Zócalo y voy a dar ese boleto a alguien que no tenga la oportunidad de ir”. Para ella, más que un gesto simbólico, es una forma de refrendar que su estilo de gobierno apuesta por la cercanía con la ciudadanía.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, coincidieron por primera vez en un mismo escenario durante la ceremonia del sorteo del Mundial 2026, realizada en el Centro Kennedy de Washington. El encuentro marcó el primer cara a cara entre ambos mandatarios, después de varios episodios de tensión diplomática y una reunión fallida meses atrás en la cumbre del G7.
Hugo Sánchez, considerado por muchos como el mejor futbolista mexicano de la historia, no ocultó su emoción al hablar sobre el privilegio de que México sea sede de un Mundial por tercera ocasión. Para el histórico goleador, esta oportunidad representa un motivo de orgullo nacional y un momento ideal para que la afición disfrute del deporte que más une al país.
Durante su intervención en el Sorteo del Mundial 2026, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ofreció un mensaje breve pero cargado de simbolismo histórico y orgullo nacional. Frente a representantes de todas las selecciones participantes, la mandataria destacó el papel de México como anfitrión por tercera ocasión en la historia de la Copa del Mundo, algo que ningún otro país ha logrado.
En un momento inesperado para la diplomacia deportiva, la FIFA otorgó al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el Premio Internacional de la Paz, un reconocimiento con el que el organismo busca destacar a líderes que, desde su posición, contribuyen —según la propia institución— a generar acuerdos y estabilidad global a través del deporte.
La historia detrás de la presencia de Claudia Sheinbaum en el Sorteo del Mundial 2026 no fue tan sencilla como una invitación más. Aunque la presidenta había adelantado que no asistiría, la FIFA terminó metiendo presión de última hora para que México no quedara ausente justo cuando sus socios de Estados Unidos y Canadá ya habían confirmado asistencia. Y al final, lograron convencerla.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, abrió la ceremonia del sorteo del Mundial 2026 con un mensaje de bienvenida dirigido a los representantes de todas las naciones clasificadas, destacando que la próxima Copa del Mundo será la más grande y diversa en la historia del futbol.
Mañana Washington será la capital del futbol mundial. Ahí, en medio de todo el protocolo que suele rodear a la FIFA, se llevará a cabo el sorteo que definirá la estructura del Mundial 2026, un torneo que desde ya se perfila como el más grande y complejo de la historia: más equipos, más partidos y más sedes repartidas entre México, Estados Unidos y Canadá.
